¿Quieres estar al tanto del movimiento en la caja registradora de tu negocio, mientras estás en tu oficina a metros de distancia? ¿Saber lo que sucede en la sala de reuniones de la oficina, mientras no estás? Al conocer qué es CCTV sabrás lo importante que es implementarlos.

 

Un CCTV es de gran utilidad en distintos contextos. En el pasado se consideraba un sistema que solo podía ser manejado por especialistas, pero su enfoque ahora es otro. Además de facilitar su manejo, hay distintos tipos que se pueden adaptar a las necesidades del cliente.

 

En este artículo queremos explicarte todo lo que necesitas saber para darle el mejor uso a esta tecnología de seguridad.

 

¿Qué es CCTV y cuál es su función?

 

 

Cuando nos preguntan qué es CCTV, la mayoría podría esperar que expliquemos que se trata de un sistema complejo. Además, que involucra el uso de una gran cantidad de dispositivos. Pero, la realidad es que, con la digitalización de la vida cotidiana, su uso se percibe como algo común.

 

Los sistemas de CCTV se comenzaron a emplear en la década de 1940, mayoritariamente, en el contexto militar y científico.

 

Ahora bien, un CCTV es un circuito cerrado de televisión, aunque algunos se refieren a él como un sistema de videovigilancia; pero, básicamente, tiene la función de registrar imágenes en video que pueden ser visualizadas y almacenadas en tiempo real.

 

Se le denomina circuito cerrado porque, generalmente, tienen acceso al área de monitoreo un grupo limitado de personas.



Estos dispositivos pueden funcionar de manera pasiva o activa, es decir, mediante un software o manejada por una persona.

 

Generalmente, este sistema está compuesto por cámaras, monitores, DVR y cables. Sin embargo, la sofisticación de esta tecnología ha avanzado en los últimos años y muchos modelos ya no precisan de cables. Además, la transmisión de los datos se hace, incluso, por wifi.

 

Después de tener mejor idea de qué es CCTV, se puede entender mejor la versatilidad de su funcionalidad. La instalación de estos equipos interconectados puede:

 

  • Prevenir, controlar pérdidas y riesgos en instalaciones industriales, comerciales o habitacionales. Esto, tanto en exteriores, como en interiores.
  • Hacer seguimiento del movimiento de clientes y empleados.
  • Ayudar a mejorar la prestación de servicios a través de la monitorización al detalle de procesos.
  • Ser un elemento de disuasión para individuos con intenciones de atentar contra la seguridad de una estructura, área o personas.
  • Expandir la cobertura de áreas en las tareas de vigilancia sin la necesidad de precisar más personal.

 

¿Qué tipos de CCTV existen?

 

 

En el mercado se pueden encontrar distintos tipos de CCTV. Especialmente, porque los desarrolladores de esta tecnología han logrado adaptarla a las distintas necesidades de los clientes.

 

Por ejemplo, hay sistemas básicos que no requieren una gran inversión para su instalación, y otros más sofisticados, para un nicho más especializado. Veamos cuáles tipos hay disponibles:

 

  • Analógicos. Cumplen con la función básica de monitoreo y necesitan una tarjeta de captura de video para la visualización de las imágenes. Sus registros son generalmente de baja resolución, aunque existe la posibilidad de digitalizarlos y son los más económicos del mercado.
  • Digitales. Al saber qué es CCTV analógico se puede inferir que el digital supone mayores ventajas. La más destacable, que las imágenes ya vienen digitalizadas desde la propia cámara. Esto significa que no necesita una tarjeta de captura de video y las imágenes que aporta son mucho más nítidas.
  • Red o IP. Este tipo de CCTV utiliza un sistema de servidor de video que le permite transmitir las imágenes a través de internet. Además, las cámaras son más robustas y versátiles, incluso, pueden llegar a formar un gran angular. También, funcionan con wifi y pueden captar audio.

 

¿Dónde se utiliza el CCTV?

 

Como ya precisamos qué es CCTV, es momento de saber ¿dónde se utiliza esta tecnología? La respuesta es, todo depende de la necesidad del cliente.  Por ejemplo, en casa se puede instalar un CCTV para monitorear qué están haciendo los niños mientras los padres no están.

 

Un CCTV es tan versátil, que se adapta a casi cualquier contexto. La clave está en cuán robusto tiene que ser el sistema a implementar. Por ejemplo, en espacios pequeños y para tareas cotidianas, puede ser útil un CCTV analógico.

 

Otro diagnóstico que se debe hacer es si el área a monitorear es más extensa o se están vigilando objetos o pertenencias valiosas. En este caso es necesario el uso de un CCTV con calidad de imagen superior y con mayor alcance.

 

En los negocios con movimiento constante de clientes y personal es oportuno implementar este sistema, para seguridad, tanto de unos, como de los otros. En instalaciones industriales también vale la inversión, incluso, como medida preventiva ante accidentes y emergencias.

 

Los sistemas de CCTV pueden ser instalados en exteriores e interiores. Por ejemplo, los más avanzados tienen la opción de manejar varias cámaras a la vez. Además, permiten ampliar la imagen de la que necesitamos ver en detalle.

 

Las autoridades policiales y judiciales también hacen uso de este tipo de sistemas en zonas amplias. Y es que ayudan a controlar qué está pasando en las calles e identificar escenarios de peligro. Los videos registrados sirven de igual manera como evidencia de situaciones delictivas.

 

Conclusiones

 

Es importante entender qué es CCTV para conocer su alcance y cómo lo vamos a implementar en nuestra cotidianidad. Estos sistemas de circuito cerrado de televisión permiten el monitoreo y control de áreas de interés.

 

Su uso se ha extendido gracias a los avances de la tecnología y la digitalización. En el pasado su aplicación se limitaba a ciertos contextos y ahora podemos verlos instalados en casas y otros espacios.

 

Un CCTV está compuesto por varios dispositivos como cámaras, monitores y DVR. En la actualidad funcionan tanto con cable, como por wifi. Incluso, algunos modelos, tienen la posibilidad de grabar audio y transmitir por internet.

 

Considerar instalar un CCTV en un negocio comercial, oficina, centro industrial o en los hogares cada vez es más habitual. Y es que tiene muchas ventajas, como la prevención y control de pérdidas y riesgos.

 

En SAT Store contamos en nuestro portafolio con sistemas de CCTV integrados con cámaras, grabadores y accesorios. 

 

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